¡Saludos desde Montería! Le estaba enseñando a mi tío cómo usar juegos online cuando terminamos en
plinko online game . Él se emocionó tanto que no me dejaba jugar. Cuando por fin me tocó, lancé unas fichas con apuestas bajas y una cayó en un multiplicador alto. No es que me hice rico, pero fue gracioso ver su cara de sorpresa. Ahora el viejo quiere jugar todos los días.